JanGela, la mesa de Apymas de Navarra por unos comedores sostenibles y saludables, ha señalado las tareas pendientes de los comedores escolares comarcales de Navarra en rueda de prensa.
JanGela publicó a mediados de abril un artículo de opinión titulado “Comedores escolares en Navarra: pliegos agridulces”. Ahora se acaba de abrir el proceso de licitación que culmina adjudicando cada comedor escolar comarcal a la empresa que más puntos consiga; este proceso viene marcado por los Pliegos de condiciones que presenta el departamento de Educación del Gobierno de Navarra.
A fecha de hoy las adjudicaciones están realizadas y los comedores escolares comarcales han empezado a funcionar con las nuevas empresas y “nuestras sensaciones siguen siendo agridulces”, declaran los y las representantes de la mesa. Según JanGela, “el resultado final es que, una vez más, el dinero ha sido determinante para obtener la adjudicación: quien más ha bajado los precios se ha llevado el gato al agua, quedando los demás aspectos relegados”.
JanGela recuerda que como ya dijeron al valorar los pliegos al inicio del proceso, “se ha impedido la participación de pequeñas o medianas iniciativas locales; no es el mejor modo de incentivar el asentamiento de personas a lo ancho del territorio. Y, por otra parte, las empresas que no han tirado los precios han sido relegadas”.
“Las empresas se han ajustado al condicionado, proponiendo además lo máximo al mínimo precio. Queda por ver quién controla y cómo controla que efectivamente las empresas adjudicatarias cumplen en la práctica aquello a lo que se han comprometido en los papeles. La tarea de Inspección va a ser fundamental y, si bien es el departamento de Educación quien tiene que llevarla a cabo, los centros deben poder implicarse, vía las personas responsables del comedor, las comisiones de alimentación, las APYMAs… En caso de incumplimiento, y en función de la gravedad, debe haber mecanismos sancionadores graduales que puedan incluso revertir la propia adjudicación”.
Aunque JanGela reconoce que los pliegos podían haber ido más lejos en diversos apartados, señala ciertos aspectos novedosos y reconoce que queda por hacer un amplio trabajo de sensibilización entre las familias y en la sociedad en general sobre la importancia y bondad de los cambios alimenticios que se proponen.
Empieza una nueva fase en los comedores escolares comarcales, gestionados por el departamento de Educación. “Como JanGela, vamos a pedir una reunión para hablar de estos asuntos e insistir en cómo mejorar los puntos débiles de todo este largo y tortuoso proceso, puntos que hemos concretado más arriba, siempre con la vista puesta en el objetivo de unos comedores escolares sostenibles y saludables”.